Como no asistir al seminario de Rainforest Alliance el pasado 15 de diciembre en Santiago, más aún si la invitación provino de Jorge Moller, gerente de la estupenda Darwin Trails y de Juan Chovar, gerente de norteamerica de TurismoChile, quien desea lograr que la oferta exportable de Chile se adhiera a prácticas sustentables. La sustentabilidad del turismo es una dirección obligada hacia la cual Chile deberá direccionarse. Y Rainforest es una certificadora (o acreditadora como lo aclararon) entre una pletora de ellas, con un sello si ampliamente reconocido. La presentación (un poco extensa) trajo una clara propuesta de valor: la acreditación produce dos consecuencias medibles: ahorro + demanda. Más claro imposible, como dijo Moller, para borrar cualquier sospecha sobre su intención como organizador, 'RA es una alternativa más, lo importante es poner el tema en el tapete', siendo esto lo más relevante de todo, pues de todos los actores que estabamos presentes, algunos estamos haciendo algo (aún poco) al respecto.
Dentro de lo positivo de la charla hay mucho que decir. Que sea esta una actividad puntual, liderada por un privado (Darwin Trails) quien simplemente desea instalar el tema en el consciente colectivo pues poco se ha hecho principalmente desde el lado oficial. Crear una nueva norma seria inconducente si es que la agregación de valor no está resuelta desde el principio, como ocurre con el sistema de calidad turística actual, de un uso inferior al esperado. Respecto a si es o no reconocido en el mercado internacional, esto no debiese ser el único incentivo. Costa Rica fue pionera y docenas de empresas se han certificado porque el Estado lo exige, no porque sea bueno para el mercado necesariamente, sino que porque es tiempo de hacerlo, y el pais tiene esa prioridad.
La insistencia de Rainforest Alliance de hacerse ver como una prueba inmaculada de las buenas intenciones sustentables llama la atención, pues ciertamente no existe nada de malo en prestar un buen servicio y ser justamente remunerado por ello, como es el caso.
Hay que mencionar algo que suele reiterarse en este tipo de charlas: largos discursos de venta personal de parte de algún asistente. Absolutamente dispensables, y le hubiesen restado una hora al menos a la actividad, que sin duda valió la pena. La idea era escuchar a RA no?